Trambahn

Hoy vamos con un juego ligerito, con temática de tranvías y solo para dos jugadores. Está ambientado de Munich en el siglo XIX, y viene en el formato de caja estándar para dos jugadores, similar al Patchwork o Exploradores entre muchos otros.

Es un juego sencillo y rápido, básicamente, la definición de filler. ¿Os interesa? Pues vamos a ello.

CÓMO JUGAR                                                                                                                                                                                                  

El objetivo del juego es conseguir el mayor número de puntos al final de la partida. Para ello contamos con diferentes tipos de caras:

- Locomotoras, que nos servirán como multiplicadores.

- Estaciones en columna, donde iremos colocando pasajeros formando filas para puntual nuestros tranvías.

- Tranvías de colores.

- Maquinistas, que son una especie de comodín.

Para empezar se colocan todas las estaciones formando una columna (hay cuatro, amarilla, azul, verde y roja). Posteriormente se reparten seis cartas de tranvía a cada jugador. Estas cartas pueden funcionar como tranvías, con un número y color correspondiente, como pasajeros, en los que solo importa el color, o como dinero, ya que por el reverso se indica que cada carta equivale a 1000 marcos.

Una vez preparada la partida, comienza el juego. En tu turno puedes hacer las siguientes acciones:

1. Colocar pasajeros (obligatorio): debes colocar 1 ó 2 pasajeros (cartas de tu mano) junto a la carta de estación del color correspondiente. cuando en un color determinado se alcancen los cuatro pasajeros (cuatro cartas de ese color), se procederá a puntuar los tranvías de ese color como se explicará más adelante.

2. Jugar cartas de tranvía (opcional): además, puedes colocar cartas de tranvía en tu zona personal. Para ello, irás formando filas de tranvías del mismo color, con la única condición de que la carta que coloques debe tener un número superior a la que ya estuviera previamente colocada en esa fila (si la hubiera, por lo que se puede comenzar una fila con el número que se desee). Las cartas están numeradas del 1 al 9, y puedes tener varias columnas de tranvías del mismo color.

3. Comprar una locomotora (opcional): si tienes dinero en tu reserva puedes comprar una carta de locomotora para conectarla a una de tus filas de tranvía ya existente, o en una vacía que posteriormente podrás llenar.

Por último, puedes descartarte cualquier número de cartas restantes en tu mano para convertirlas en dinero disponible para el próximo turno, y robar del mazo hasta tener seis cartas de nuevo. Además, cada columna de tranvías de cada jugador que no tenga una locomotora se descarta inmediatamente.

Y ahora queda la parte más importante, ¿cuándo acaba el juego? y, sobre todo, ¿cómo se ganan puntos? Pues bien, cada vez que una estación tenga cuatro pasajeros, se puntúan las líneas de tranvías de cada jugador de ese mismo color. Para ello, cada carta de tranvía vale un número determinado de puntos, por lo que se suman esos puntos y se aplica el modificador de la locomotora bajo la que se encuentren (que básicamente multiplica por 2, 3 ó 4 según el tipo). El juego termina cuando se ha puntuado 7 veces de esta forma (da igual qué color se puntúe).

Además, están los llamados viajes extra, en los cuales se puntúa una fila de tranvías personal cuando la columna llega a contener 8 cartas. Aquí entran en juego los maquinistas, que, como he dicho antes, son una especie de comodín, ya que equivalen a cualquier color y no tienen número, por lo que pueden ponerse detrás de cualquier número en la columna de tranvías, y prácticamente son los únicos que te permiten llegar a ocho cartas en una columna (sin ellos es posible, pero muy complicado).

Ah y cuando se acaba el mazo de robar todo el mundo pierde la mitad de su dinero, así que cuidadito.

COMPONENTES                                                                                                                                                                                             

La caja trae un buen mazo de cartas y un bloc de hojas de puntuación para que no tengas que acordarte de nada. El material es correcto, no es para tirar cohetes, pero está bien. Las cartas tienen borde blanco (aviso a los amantes de borde negro de Magic), y lo que me parece más original es que cada estación tiene un dibujo distinto y representa la correspondiente estación en la realidad.

VEREDICTO                                                                                                                                                                                                     

Opinión de Zeros

Este juego me ha dejado con una mezcla de sensaciones. Por un lado, veo los múltiples usos de las cartas, las sinergias entre las distintas mecánicas, cómo se han cuidado detalles como la pérdida de la mitad del dinero al dar la primera vuelta al mazo, etc. Todo ello da sensación de ser un juego al que le han dado muchas vueltas, en el que han volcado mucha materia gris, y que va a ofrecer muchas posibilidades.

Sin embargo, después de jugarlo yo me quedo frío, no siento que el juego me aporte nada, nada aparte de ganas de jugar a Los Exploradores (Lost Cities) y olvidarme de Trambahn.

Opinión de Kya

Si habéis jugado al Exploradores, este juego es básicamente lo mismo con algún añadido más, para mi gusto innecesario. No me malinterpretéis, el juego no está mal, pero tampoco es algo a lo que volvería a jugar. Está entretenido, es cortito y está bien para dos, aunque en general no tiene demasiada interacción, más allá de los pasajeros que son comunes.

En mi opinión hay mejores juegos para dos con estas características, pero tampoco puedo ponerle pegas, es un juego correcto, en el que todo cuadra y en el que no hay que pensar demasiado.