viernes, 21 de julio de 2017

Holmes: Sherlock & Mycroft

Hoy nos trasladamos al mundo de Arthur Conan Doyle: el Londres del mismísimo Sherlock Holmes, para hablar de un pequeño juego de colección de sets y colocación de trabajadores para 2 jugadores, en el que nos enfrentaremos hermano contra hermano, Holmes contra Holmes, para demostrar quién es el mejor investigador. 

CÓMO JUGAR
El objetivo de Holmes es tener la mayor cantidad de puntos al final de una semana (7 turnos) de investigación, que se obtienen consiguiendo sets de cartas de pista, pero empecemos por el principio.

Al principio de la partida uno de los jugadores toma el papel de Sherlock y otro del de Mycroft (la decisión es puramente temática, no hay diferencias) y cada jugador recibe 5 fichas de investigación y 3 peones de su color. 
Se baraja el mazo de cartas de pista y se sacan 4 cartas boca arriba al centro de la mesa. Después se prepara el tablero central, que representa los días de la semana. Del mazo de personajes se roban 3 cartas y se colocan en las casillas indicadas como día 1. Watson, Ms. Hudson y Lestrades siempre estarán disponibles, pero el resto de personajes aparecerá antes o después en cada partida.


Los jugadores después alternan turnos colocando a sus peones sobre los distintos personajes, para realizar la acción de investigación indicada en los mismos. Algunos, como Ms. Hudson, les permitirán obtener fichas de investigación, mientras que otros como Lestrade les permitirán cambiar esas fichas de investigación por cartas de pista. 
Otros tienen habilidades algo más enrevesadas, como dejarte robar cartas boca abajo, sin revelar a tu rival que son. Otras habilidades incluso dependen de en que día de la semana aparezcan, como Billy. Las cartas no tienen texto, pero la iconografía es sencilla y al haber sólo 12 cartas, en seguida te haces con ella.  


Cuando los dos jugadores han jugado sus tres peones, se comprueba si algún personaje está agotado y después se pasa al día siguiente de la semana, robando un nuevo personaje. Los personajes se agotan cuando ambos jugadores los visitan el mismo día, lo que hace que no estén disponibles al día siguiente. 

Sin embargo, es importante recordar que en ningún momento los jugadores recogen sus peones. A partir de la segunda ronda, para los jugadores tomarán uno de sus peones del tablero y lo colocarán en una acción distinta en la que no tengan otro peón. Lo colocarán tumbado para saber que ese peón ya ha sido movido. Así, los jugadores deben ordenar bien sus acciones, para no bloquearse a si mismos la que querían hacer en el momento que la querían hacer. 

Al final de la ronda 7 la investigación termina y se procede con la fase de puntuación. El mazo se compone de cartas de pistas numeradas del 3 al 9, con tantas copias de cada carta como su valor, y 5 mapas. Los sets numerados se puntúan de la siguiente forma: El jugador con más cartas de ese set suma tantos puntos como el valor del set, menos el número de cartas del mismo que tiene su rival. Por ejemplo, si Sherlock tiene 5 nueves y Mycroft 2, Sherlock puntúa 9-2=7 puntos. 
Los mapas son un poco diferentes, ya que ambos jugadores los puntúan. La cantidad de puntos depende de cuantos tengas, está indicada en la propia carta y va desde -1 (1 mapa) hasta 10 (los 5).


Además, el juego tiene una variante en la cual introducimos personajes malos, Moriarty y Moran en el mazo de personajes. Cuando se roba uno de estos personajes al principio de una ronda, ambos jugadores sufren una penalización. Además, ese día no habrá nuevo personaje y habrá 1 o 2 personajes que no salgan en cada partida.


COMPONENTES
Para el reducido precio del juego los componentes están genial. Las cartas, contadores fichas y tablero son de muy buena calidad. Las ilustraciones no son gran cosa en general, al fin y al cabo la mayoría son dibujos de una huella dactilar o una colilla de cigarrillo, pero los dibujos de los personajes están chulos y el diseño artístico esta bastante bien, en línea con la temática.



Una cosa que me ha gustado bastante es el esfuerzo por dar temática a un juego que no deja de ser abstracto. En el manual cuentan la historia de cada personaje que aparece en el juego y el papel que desempeña en las historias de Holmes, para quién no se las haya leído, e incluso tratan de justificar porqué tiene la habilidad que tiene y no otra.  Incluso el tablero, cuando lo doblas parece una libreta.


VEREDICTO

Opinión de Zeros
El juego está bien. Una temática atractiva, aunque secundaria, reglas fáciles, habilidades y sinergias interesantes y una mecánica original en la colocación de trabajadores sin recogerlos, que le da un punto más de estrategia. El sistema de puntuación también es original, dando valor a las cartas incluso cuando es matemáticamente imposible tener la mayoría en un set. 
El orden en que salen los personajes añade al juego una buena dosis de variabilidad. La variante con Moriarty y Morán, sin embargo, creo que no añade nada. Simplemente cuando salen molestan a ambos jugadores y luego la vida sigue como si nada. 

Lo que me chirría del juego es que, en todas las partidas que hemos jugado el mazo de cartas se ha agotado en el último turno, por lo que ha habido que volverlo a barajar para seguir sacando cartas de pista. Esto hace que cualquier intento de negar el acceso al rival a una carta descartándola, o cualquier intento de contar cuantas han salido de cada y cuantas necesitas para llevarte un set, sea inútil. La primera vez que pasó pensé "qué casualidad que nos haya pasado esto". Pero es que pasa siempre y estropea un poco la experiencia del juego, haciendo algunos personajes, como Porky Shinwel, totalmente inútiles. Personalmente lo considero un fallo de diseño que estropea un buen juego con ideas muy originales.

Opinión de Kya
Por mucho que se empeñen en meter la temática con calzador, al final todo se reduce a un juego de hacer sets de cartas de colores. Es cierto que las cartas de acción tienen su gracia, pero al final es solo eso, una acción. El juego está entretenido, hay bastante interacción, y me parece muy original la mecánica de los meeples. Sin embargo, lo estropea un poco el hecho de que al final siempre salgan todas las cartas, ya que pierde valor el echo de descartalas previamente, ya que van a volver a salir tarde o temprano.

En general un juego correcto, sin más, ni para bien ni para mal, quizá un poco sosito, pero entretenido.

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